Siempre que afloran los prejuicios éticos o nacionales,
en tiempos de escasez, cuando se desafía la autoestima o vigor nacional,
cuando sufrimos por nuestro insignificante papel y significado cósmico
o cuando hierve el fanatismo a nuestro alrededor, los hábitos de pensamiento
familiares de épocas antiguas toman el control. La llama de la vela parpadea.
Tiembla su pequeña luz. Aumenta la oscuridad.
Los demonios empiezan a agitarse (Carl Sagan).

¿Dónde está Asma El -Assad?

viernes, 2 de septiembre de 2011

Dónde está esa chica mona, tan finita, tan europea ella, tan vecinita de al lado (al contrario que esa moza, Mozah de Qatar, de físico agresivo), a la que tantas portadas se han dedicado dentro y fuera de este país? ¿Qué dice ahora de lo que pasa en su tierra, de las matanzas, de los abusos..? Eso es lo que se preguntan en esta publicación.

Ah, pero ¿es que antes decía alguna cosa sobre la demostrada colaboración de Siria con Hamás y ya no digamos con la vergüenza de tener controlado todo un país, Líbano, a través de Hezbollah, partido político con su propio ejército (es como si Bildu, además, tuviera fuerzas militares (ah, ¿no las tiene?))?

Hay una Arcadia "cool" donde conviven esposas (primeras o no) de sátrapas, algunas ONG´S que fotografían modelos solidarias con negritos demacrados, organizaciones de las Naciones Unidas donde "trabajan" personajes de la la jet, Brangelinos, políticos de la izquierda pero también de la derecha, "socialites" de todo tipo, realezas, Mandelas.... Es que hoy en día te hablan de "solidaridad" y tienes que decir que tú no gracias.

Y eso es el plasma por el que fluye cualquier noticia, articulito o nuevas botas de Dior en TODAS (oiga, todas) las revistas femeninas. Y porque no leo las masculinas de gente guapa y ropa cara.

La terrible estética del pensamiento flácido.

1 comentario:

Manuel Álvarez dijo...

El tema Sirio es para vomitar y no parar. El silencio es absoluto por parte de la mayoría.

Lo que comentas de las mujeres, revistas, moda y otros, es la guinda del pastel. Apestoso pastel.